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Rebeldía, juventud y lectura


Gente dedicada y apasionada por las letras, que la vida me va poniendo al encuentro, me invitó a participar en un debate en el marco del Mes del libro y del escritor. Se habló sobre la lectura en este siglo XXI, la falta de interés de niños y jóvenes en la literatura, de los métodos de enseñanza, la falta de tiempo que los mayores le dedican a los menores… también se lanzó la pregunta si es que no había rebeldía por conseguir los ideales ya que en tiempos de exilio, surgieron grande obras y grandes escritores.

Como me siento aprendiz respecto de la literatura y aunque soy de decir absolutamente todo lo que pienso de buena manera, me costó acomodarme y dar conceptos; pero hice algo muy importante: escuché, fui grabando en el “disco duro” y luego lo analicé. Llegué a una conclusión que me pasmó y quiero contárselas…

Según la ciencia, la mente humana no acepta una imposición, se le puede sugerir hacer algo, no darle una orden; tampoco nuestro inconsciente registra la palabra “no”, así si digo “no quiero a tus amigos”, el cerebro interpreta “quiero a tus amigos”. Según el diccionario la rebeldía es sublevarse, es levantar a alguien haciendo que falte a la obediencia establecida, es oponer resistencia; pero no habla de métodos. Con esto debemos concluir que todos somos rebeldes. También empecé reconociendo algo tan básico como que los niños y jóvenes actuales son hijos y nietos nuestros, por lo tanto en algún lugar tienen nuestra esencia o lo que les hemos transmitido. Entonces la deducción lógica sería decir que los niños y jóvenes deben ser rebeldes, pero… ¿Cómo lo demuestran?

¿No será que justamente en esa apatía está la rebeldía? ¿No será que la rebeldía es negarse a los cánones de una sociedad que no entiende o no sabe lo que busca en ellos? Sin las pancartas, manifestaciones populares o actos extremos de nuestras épocas; con indiferencia y pasividad, ¿así expresan que no les sirve el sistema antiguo? ¿Con música y estilos artísticos que no comprendemos o no nos gustan? ¿Con falta de contenido, según nosotros?

¿Podemos reconocer esto en nuestra rebeldía y deseos de no violencia? Yo sí me veo así: negada a la imposición, pero absolutamente pacifista y trabajando desde adentro, en mi entorno. No acepto muchos conceptos de la sociedad actual, pero reconozco el derecho de los demás a ser lo que quieran; comulgo con varias corrientes, pero no me sumo a multitudes para hacer valer mis creencias, son mías; creo cada vez menos en las instituciones, pero no las voy a destruir solo ignoro las que puedo. O sea… para muchos puedo ser apática, insensible social, poco comprometida, etc., etc. Lo que pasa es que de vieja entendí que lo más importante está dentro de mí, que lo traigo desde siempre y que mi única tarea es reconocerlo y trasmitirlo con actos, si todos actuáramos así las cosas e ideas caerían por su propio peso. ¿No será eso lo que nos quieren decir?

Son rebeldes, nos hablan, nos dicen cosas… pero creo que no tenemos la capacidad para interpretarlos, ayudarlos, guiarlos y utilizar positivamente todo lo que ellos tienen dentro porque queremos hacerlo a nuestro modo y no al modo y con las herramientas de ellos. Estamos en una era de cambios, empecemos por cambiar nosotros, a lo mejor así entendemos, apoyamos y nos sumamos a la rebeldía de nuestros niños y jóvenes.


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